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- El vicepresidente de la institución provincial, Fran Valera, ha hecho entrega de los diplomas que acreditan esta cualificación profesional a las participantes de la nueva edición de este curso que se ha impartido en Mahora en el marco del programa ‘Dipualba Protege’
El vicepresidente de la Diputación de Albacete, Fran Valera, ha participado junto al alcalde de Mahora y diputado del Grupo Popular, Antonio Martínez, en la entrega de diplomas a las alumnas del itinerario formativo de ‘Atención Sociosanitaria a personas dependientes en instituciones sociales’ que se ha impartido en dicha localidad en el marco del programa ‘Dipualba Protege’ impulsado por la institución provincial y el Fondo Social Europeo.
En total, han sido 13 las personas que han superado las más de 500 horas de formación de un itinerario que comenzó el pasado mes de abril con 18 participantes, y que ha finalizado con la mejora de la cualificación profesional de doce mujeres y de un hombre; cinco de las estudiantes son naturales del municipio sede (Mahora) y, las siete restantes, de otras localidades de la comarca de La Manchuela.
En total, han recibido 571 horas de aprendizaje entre teoría, práctica, formación complementaria y tutorías periódicas, incluyendo: apoyo a la inserción, búsqueda de empleo, fomento del emprendimiento y del autoempleo, y también prevención de riesgos laborales. Todo ello, habilitando a las trece graduadas para atender de manera profesional a personas mayores y dependientes (ya sea a nivel físico, psíquico o sensorial) con el fin de mantener y mejorar su autonomía personal y sus relaciones con el entorno.
Durante la entrega de diplomas, Valera se ha mostrado convencido de que la Certificación obtenida abrirá nuevas puertas en el mercado laboral a quienes la han cursado; de hecho, más de la mitad del alumnado que ha realizado este itinerario, ha obtenido un empleo incluso antes de finalizar la formación.
El vicepresidente las ha felicitados por haber dado el paso de optar a esta iniciativa formativa orientada a potenciar y mejorar su empleabilidad y que ya les ha facilitado un contacto directo con residencias de mayores de la comarca mejorando, de manera exponencial, su posición en el mercado laboral.
“Este itinerario de ‘Atención Sociosanitaria a personas dependientes en instituciones sociales’ impulsado por la Diputación en el marco del programa ‘Dipualba Protege’ es un ejemplo claro de lo que significa dignificar el oficio de cuidador y cuidadora porque, además de ofrecer una oportunidad de trabajo real, pone en valor la importancia de desarrollar profesionalmente esta labor tan humana y tan fundamental” ha apuntado Valera, que también ha querido recordarles que, aunque el curso haya finalizado de manera oficial, seguirán teniendo el apoyo de este programa que tiene en el acompañamiento prácticamente personalizado una de sus grandezas: “No vais a estar solas; si lo necesitáis, se os va a aconsejar y este Certificado de Profesionalidad que hoy habéis recibido, os abre una puerta importante porque las redes actuales en este sector son amplias”, les ha dicho.
Formación orientada a las potencialidades de cada comarca
Valera también ha querido agradecer la participación activa del Ayuntamiento de Mahora en el desarrollo de este itinerario, subrayando el importante trabajo técnico que hay tras la compleja coordinación de este Programa formativo que responde a dos grandes objetivos por los que viene trabajando el Ejecutivo presidido por Santi Cabañero: fijar población en el medio rural, y ser un apoyo directo a quienes, por diversas circunstancias, son más vulnerables o encuentran mayor discriminación a la hora de encontrar un empleo.
Así, el programa está orientado a personas paradas de larga duración, mujeres, víctimas de violencia y quienes (por razones de raza o de origen) sufren discriminación. A su término, el desarrollo de esta iniciativa en la provincia, ha recordado Fran Valera, supondrá “introducir a más de 1.500 personas en el mercado laboral” merced a una inversión presupuestaria cercana a los 10.000.000 € de los que la Diputación aporta el 20% (unos 2.000.000 €), y el Fondo Social Europeo el 80% restante (casi 8.000.000 €).
